En este día especial, no vamos a regalar más flores, más halagos ni dedicar canciones, pues sus correos y estómagos estarán repletos de detalles, de por sí el hecho de ser mujer es el mejor regalo que se puede recibir. Por otra parte está el sexo fuerte, los dominantes hombres, creadores de la vida y el sistema productivo; entendemos desde diferentes ámbitos que las mujeres en su evolución fueron cada vez más desplazadas por la dominación natural, política y económica del Hombre.
El 19 de Noviembre fue declaro el día internacional del Hombre, lo curioso es que Colombia, el país del mundo con más feriados y días festivos, no se suma a la lucha de nuestros hermanos hombres que tienen mucho que reclamar en torno al 8 de Marzo y el fuerte movimiento mundial feminista.
Los hombres no padecen los vaivenes de la naturaleza de la misma cruel forma que nosotras, pero sí deben soportar cambios de voz disonantes y anti estéticas formas más que aparecen en la pubertad. Además de ello, se encuentra latente el terror hacia las jornadas de reclutamiento, los cortes de cabello, el ceder el puesto, y no sólo en un autobús también se ha visto la desigualdad laboral, el gastar grandes sumas de dinero en hembras sin consciencia, entre otras razones por las cuales debería existir el movimiento hombrista, para luchar contra las desigualdades de género que aquejan pequeños detalles de su bienestar.
Sin embargo esto parece insignificante para la mayoría de los hombres, porque al parecer no comprenden los terrenos que la mujer ha creado y conquistado. La equidad de género, fin último de la sociedad justa según la lucha feminista, permite que tanto hombres como mujeres sean vistos como seres humanos y sean tratados igual ante la ley, el Estado, la ética y las normas sociales.
Por otra parte está la comunidad LGBTI, grandes amigos del movimiento e impulsadores de muchos cambios sociales a nivel global. Estas personas han sido los aliados de la lucha que lleva la mujer desde la Ilustración. Tal vez la participación activa de éstos ha generado la homofobia típica del heterosexual masculino, quién ve estas cuestiones de equidad de género como espacios para que gays y mujeres tengan la participación suficiente para no interferir en sus planes.
Bueno a esta querida clase dominante masculina le agradecemos su aporte y organización social, pese a los múltiples y garrafales hechos históricos, pero que si duda han contribuido a que exista el movimiento como tal. No se podría terminar este análisis del movimiento hombrista sin invitar a la concertación, las luchas o bueno sin ponernos tan revolucionarios, el desarrollo social se debe poner sobre la mesa con todos los actores sentados en ella y con porciones iguales a cada presente.
No siendo más, no les quito más tiempo en lectura de género, deseo que este día no sea para aumentar más de peso sino para aumentar la cifra de mujeres que habitan en este siglo XXI, y reducir las que se quedaron en la Edad Media (por no ir más lejos).
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